Críticos, escépticos y bocazas. Presentación.

Y llegó el libro: Críticos, escépticos y bocazas…

En junio del 2016 decidí lanzarme a la aventura y escribir un libro. En realidad buscaba, agobiado por aquello de “la fugacidad” (de la vida), dejar algún legado a mi hijo, tan pequeñito aún entonces, que no fueran bienes materiales (que ya bien poco sería por mi parte) y el recuerdo de un padre cascarrabias y amante de las “batallitas”.

Como el libro pretendía dar un discurso de sentido común más que contar mis vivencias, pero dependía en cierto modo de estas últimas, y yo soy español, para bien o para mal, el libro se tituló «Críticos, escépticos y bocazas. España a la cabeza de un mundo barroco y antirracional”. Y este título bien podría ser cambiado por cualquier otro si se requiriera y si llegara a publicarse, pues hace tiempo que se terminó y ya está en fase de últimas correcciones.

En este pequeño intento de pensamiento traté de englobar lo que considero más importante simplemente para que mi hijo, o cualquiera al que interese, pueda, si es el caso, encontrar un enfoque quizá algo distinto de problemas que nos asaltan a diario. Así se trata desde cuestiones como nuestra aún cercana transición política, hasta el jaleo que se montan algunos con el paradigma darwiniano, la cuestión tan recurrente en situaciones de crisis del nacionalismo, el orgullo, el trabajo, la educación… lo de siempre.

Sin duda buscaría en mi hijo una apreciación más personal: cómo pensaba realmente este vejestorio, que dice ser mi padre, y todavía toca con la guitarra eléctrica “Desert Plains” de Judas Priest, pero también adora a Duke Ellington. No obstante me gustaría también, aun siendo pretencioso por mi parte quizá, poder aclarar algo a alguien que no sea “de mi sangre”, del mismo modo que su escritura me aclaró a mí muchas cosas que antes no había analizado bien.

Como avance, dejo aquí en este blog el tercer capítulo que dediqué a la educación. No es el más extenso, y creo que ofrece una idea cercana a cómo es el discurso general del libro, que no pretende más que ofrecer lo que entendí sobre algunos asuntos, en mi paso por este extraño mundo que creamos.

Críticos, escépticos y bocazas_Educación.pdf